CANCIONERO LÍRICO – PRISMA 99 – El Candil Pedregalero – Año II – N° 91.-
Charles Chaplin es el creador de esta melodía, que viene a ser el tema musical de la película del mismo nombre, donde él es el guionista, productor, director, y además protagonista.
Esta película fué producido en el año 1952 en los EE.UU, y su trama se desarrolla en Londres durante la primera Guerra Mundial. Es la historia de amor que surge entre un viejo cómico veterano, decadente y alcohólico, de nombre Calvero, interpretado por Chaplin, y una joven atormentada a la que salva cuando esta se va a suicidar.
La composición lírica de este cortísimo poema es bastante simple, y expresa el pesar que siente este hombre ya mayor, por tener que rechazar el amor de una joven que se ha enamorado de él, y que, consciente de no poder satisfacer los anhelos de la joven, se ve obligado a rechazarlo, a pesar que en un pasaje de la trama, ante la desesperanza y el desprecio por la vida de la joven, este afirma que la desesperanza se puede vencer si solo vive en el presente.
La verdad que Calvero demuestra aquí una gran integridad, ya que si es cualquier otro, no deja pasar esa oportunidad, como bien lo expresa Simón Díaz cuando el amor llega así de esta manera, o cuando José José lo expresa en aquella famosa melodía 40 y 20.
La melodía es magistral, y agrega esa vitalidad única al poema, que hacen de este binomio una creación inolvidable, sutil, armoniosa y muy emotiva.
Ha sido versionada por muchos cantantes, y muchos se asombran cuando descubren que su autor fue Charles Chaplin.
En esta ocasión presentaré la versión musical de un cantante brasileño cuya tesitura de su voz es muy similar a la de Roberto Carlos; se trata de José Augusto, quien además es compositor. Espero la disfruten cómodamente en su mullido sillón, evocando esta situación, si es que a usted le sucedió alguna vez.
I Tú llegaste a mí cuando me voy, Eres luz de abril, yo tarde gris, Eres juventud, amor, calor, fulgor de sol, Trajiste a mí tu juventud cuando me voy. II Entre candilejas te adoré, Entre candilejas yo te amé, La felicidad, que diste a mí vivir, se fue, No volverá nunca jamás, lo sé muy bien.
Caracas – Distrito capital – Venezuela
