Por Nervis Nava

En todos los planos de existencia, mental, físico  y espiritual, se encuentra presente la vibración; no solo fue enunciado desde la antigüedad por los sabios y Maestros, sino que ha sido plenamente demostrado a través de estudios sobre Física y Espiritualidad, realizados entre otros por Brat Hunter,  quien nos dice que cada uno de nosotros es un sistema de energías en “vibración” contínua, es decir, que las moléculas que componen cualquier materia, inclusive nuestros cuerpos, están en constante “vibración”; y de hecho las diferencias que se establecen entre los diversos planos, surgen de los diferentes grados y variables de esas  vibraciones, que son denominadas “Escalas”.

“Aquél que entiende el Principio de Vibración, ha captado el cetro del Poder”

Así existen por ejemplo, una Escala de Valores, que viene a ser la lista personal y subjetiva de valores jerarquizados, que conduce la acción de cada individuo; o la lista particular de cuestiones morales en prioridad de importancia para cada persona; siendo el “valor” la estimación positiva o negativa que se le atribuye a cada uno, dentro de los cuales, se tiene como características morales en una persona, el respeto, la humildad, la responsabilidad, la solidaridad, entre otros.

La Escala Musical que  es  un conjunto de notas o sonidos ordenados, de forma ascendente (de grave a agudo) o descendente (de agudo a grave), uno a uno en posiciones específicas, llamadas grados, siendo identificadas en notas, DO, RE, MI, FA, SOL, LA , SI, …….y para quienes son conocedores de la música, saben hacia dónde van las más intensas o la más bajas, al identificarlas en sus partituras musicales; igualmente dentro de los que interpretan música clásica, se clasifican de acuerdo al “tono” de sus voces, como Tenor, Soprano, MesoSoprano, entre otros.

Encontramos también una “Escala Cromática”, que viene a ser la escala de los colores, referida a la variación graduada de luminosidad, tono o la saturación de un color, que puede ser cromática o acromática, porque aunque luzca extraño, existen colores sin color.

Igualmente se tiene una “Escala Sismológica”, que indica la intensidad de los movimientos sísmicos,  y conocida como la escala sismológica de Richter, en honor a su creador Charles Francis Ritcher, denominada Escala de magnitud Local, que asigna un número para cuantificar la energía liberada en un terremoto.

Y así podríamos ir mencionando las diferentes escalas dentro de cada una de las vibraciones en los diferentes planos; más, haremos especial referencia a lo relativo en las vibraciones que afectan al Ser humano en el camino de su evolución.

“Para cambiar nuestro humor o estado mental, Debemos cambiar primero nuestra vibración”

Toda manifestación de pensamiento, emoción, razón, voluntad, deseo, o condición mental, está acompañada por vibraciones, las cuales no solo afectan la propia mente del individuo, sino que dependiendo del grado donde se ubique en escala, puede afectar las mentes de otras personas; donde se originan los casos de telepatía y otros fenómenos psíquicos.

Es así como llegamos a la “Escala de Conciencia” elaborada por el Dr. Hawkins quien demostró cómo la emoción humana tiene “vibración”  y esta afecta la conciencia. ¿Cómo funciona esta escala? Para determinar dónde se encuentra una persona dentro de esta escala, se tiene que,  cuando una persona está dominada por emociones “duras” como la tristeza, la culpa o la humillación, están vibrando en frecuencias muy bajas; mientras que sentimientos como el Amor, emociones como la alegría, la ilusión, elevan las vibraciones a frecuencias más altas y edificantes.

Es por ello que el promedio de una persona está por 207 en esta escala, y eso se debe que a lo largo de la vida, se van acumulando bloqueos de energía y condicionamientos negativos que obstaculizan el avance hacía vibraciones más altas; manteniendo a la gran mayoría dentro del espectro en el extremo inferior, donde la prosperidad, y el bienestar se hace más lento.

El nivel al que todos deberíamos llegar dentro de esta escala es sobre 500 o más, que es la vibración del AMOR. Al vibrar en este nivel, la vida se torna radicalmente diferente; es cuando el dolor, el estrés y la luchan se desvanecen, y al aumentar el Amor, la alegría hace presencia en nuestras vidas y la abundancia en todas sus manifestaciones fluye con total naturalidad, convirtiéndonos en imanes para todo lo que se desea; y aquello que sentimos que merecemos y de lo que somos dignos.

Por eso es de vital importancia para el crecimiento personal y avance espiritual,  elevar nuestra frecuencia vibratoria, como sinónimo de avanzar, crecer y mejorar, ayudándonos a entender mejor el mundo donde vivimos .

Para lograr ir de manera ascendente en esa escala, se debe asumir una conducta positiva, poner en práctica sobre todo una Regla de Oro que dice que “No le hagas a otro lo que no quieres para ti”, es llevar una vida con altos valores morales y espirituales; que nos permitan vivir en armonía y con tranquilidad.

Todo esto no hace sino confirmar que en el Universo existe un Orden Perfecto de Vibración, a diferentes grados y escalas; pero todas solo reflejan los diferentes grados de intensidad vibracional de cada uno; y al referirnos al Ser Humano, va a depender en qué grado vibre y estará más alto o más bajo, más cerca o más lejos, de elevarse sobre las dificultades de la vida….aprendiendo a vibrar en escalas superiores para escapar de los sufrimientos de planos inferiores.

Naguanagua-Estado Carabobo-Venezuela

13 de octubre de 2019