EL CANDIL – AÑO III – N° 140.
Prólogo Albani Cordero:
Dios te ama en tus días buenos y en los “malos”. Te ama cuando puedes sentir su amor y cuando crees que está ausente, porque su amor es incondicional; ama a la humanidad entera… es el amor perfecto como lo describe Juan 4, 18: “En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor, echa fuera el temor…”. Dios es tu aliado, te ama, te acompaña y te bendice… siempre.
Lucas 17, 20-25.
“En aquel tiempo, los fariseos le preguntaron a Jesús: “¿Cuándo llegará el Reino de Dios?”. Jesús les respondió: “El Reino de Dios no llega aparatosamente. No se podrá decir: “Está aquí” o “Está allá”, porque el Reino de Dios ya está entre ustedes”. Les dijo entonces a sus discípulos: “Llegará un tiempo en que ustedes desearán disfrutar siquiera un solo día de la presencia del Hijo del hombre y no podrán. Entonces les dirán: “Está aquí” o “Está allá”, pero no vayan corriendo a ver, pues, así como el fulgor del relámpago brilla de un extremo a otro del cielo, así será la venida del Hijo del hombre en su día. Pero antes tiene que padecer mucho y ser rechazado por los hombres de esta generación”. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Reflexión por Ricardo Bulmez
Jesús sabe que en Jerusalén no le va a ir nada bien. Todos presentimos lo que va pasar con nuestras vidas… Tú lo sabes… lo sospechas. Y para esto, para vislumbrar sobre tu vida, no hace falta leer los astros, aunque hay gente que lo hace y muy bien. Pero tú sabes lo qué va a pasar con tu vida sin llegar a ser un adivino profesional. Tú esperas que si siembras y cuidas una semilla de mango vas a cosechar sus frutos.
Tú sabes que lo que comienza mal no siempre termina mal, y que lo que comienza bien no siempre termina igual que comenzó. En aritmética, 2+2=4, pero en la vida esta suma se puede convertir en una resta o en cualquier resultado. Las matemáticas son perfectas no los matemáticos, y los políticos y académicos tampoco en referencia a la política y a la realidad de los pueblos. Tú sabes qué va a ser de tu vida, con todo su contenido. Por tanto, o sigues por donde vas o cambias de rumbo. Pero, tú sabes… no te hagas el loco o… la loca. Ponles más atención a tus sospechas, a tus presentimientos y conjeturas. Pero no les hagas mucho caso, simplemente atiéndelas.
Jesús intuía lo que pasaría en ese caminar hacia Jerusalén. Y, no tanto por ser hijo de Dios sino por ser hijo de María y de José. Lo sabía por ser humano y por ser Dios. Aunque a veces la luz divina opaca a la humana. Verdadero Hombre y Verdadero Dios. El Señor estaba consciente de los intereses que estaba afectando y con qué gente se estaba metiendo. Sí, sí… lo sabía. Se lo decía el lenguaje de su estómago y de su corazón. Conocía perfectamente el efecto que producía lo que había predicado, los enfermos sanados y de lo que había enseñado a rezar… y de que todos somos hermanos y, por tanto, iguales.
En el evangelio de hoy aprendí… Para Jesús, el Reino de Dios ya llegó, está en medio de nosotros, independientemente de nuestro esfuerzo o mérito. Él tiene otro modo de ver las cosas, otra mirada para leer la vida. Dios no me ama porque me he portado bien ni me rechaza, por lo contrario. Me ama porque Él es amor…
Pensamiento del día… Ama, ama, ama… Y cuando te canses de amar -porque todo cansa-, ¡continúa amando! La cruz de Cristo no es símbolo de sufrimiento sino de amor. Por eso, cada vez que amamos, con risa o con llanto, nos acercamos a Dios. La vida de Jesús es nuestro camino… La acción que hagas hoy es sembrar el fruto del mañana. No siembres tempestades…
Tarea para la casa… Hoy haz una acción de amor dirigida a tu vida: cuerpo, mente, relaciones humanas, a la naturaleza y a tus bienes materiales. Aunque sea sencilla, por ejemplo… “¡Qué nariz tan atractiva tengo!”. “¡Lo que pienso siempre es bonito!”… “¡Estás hermosa!”, “¡Qué bello está el cielo!”, “¡Qué cómoda es la casa donde vivo!”, “¡La ropa que uso no está a la moda, pero me cubre del frío!”. Cultiva alguna acción de justicia, paz y libertad…
Padre Ricardo Bulmez.
Los Teques – Estado Miranda – Venezuela
