¿Crisis existencial?¡Vivir a la defensiva!

NERVIS NAVA – EL CANDIL – AÑO IV – N° 167.

“No sabemos lo que queremos y aun así somos responsables de lo que somos, eso es lo que somos, eso es un hecho”

Jean Paul Sartre

Los seres humanos decidimos qué hacer y cómo hacerlo, por cuanto somos dueños de nuestro comportamiento, por tanto somos responsables por nuestros conflictos internos, caracterizados por la impresión de que la vida en ocasiones carece de sentido, dando origen a enfrentar las llamadas “crisis existenciales” cuyo momento se presenta en nuestra existencia al enfrentar un período de no comprensión y cambios profundos, viéndose como un espacio de tiempo caracterizado por la introspección, y  donde cada persona puede vivir de forma diferente y con diversa intensidad.

No obstante, las causas de una “crisis existencial” pueden ser profundas y se deben ubicar en motivos como, la sensación de estar solo y aislado en el mundo, en la comprensión del alcance de la mortalidad, en no encontrar un propósito en la vida, trayendo todo ello consigo síntomas de sentimientos de cansancio, agotamiento, desamparo, tristeza, confusión, ansiedad, angustia, rabia, frustración, cólera, además de los síntomas físicos como el llanto, temblor, palpitación y sudoración; agotando la mente con pensamientos como que “no le encuentro sentido a la vida”, “no sé que haré en el futuro”, las cosas no me llenan como antes”; siendo generalmente  ideas que no se presentan sorpresivamente, sino que se van presentando por un lapso de tiempo, luego de sufrir alguna crisis posiblemente en relación de parejas, el término de alguna relación laboral, relaciones de rechazo, acontecimientos que indican algún cambio en la dirección de nuevos objetivos, y a lo que se debe buscar solución, porque de continuar en esa actitud, y permanecer en ella es entrar en una espiral negativa que conduce a una grave “depresión”.

“No se trata de borrar las emociones negativas que nos pueden causar ciertos hechos, sino de reducir su intensidad”

Jonathan García-Allen

Un factor importante de manejar en  las “crisis existenciales”, es el control que se ejerce sobre las emociones, porque ellas están siempre presentes y hay que aceptarlas, en caso contrario, conducen al aumento de la intensidad de las mismas, y es cuando al no ser capaces de enfrentar las  emociones frente a los acontecimientos que se nos presentan, echando mano a los recursos de los que disponemos, es cuando la “crisis” domina, caracterizándose porque implica un cambio en la identidad del individuo, sintiendo que hay un cambio de personalidad, o se cambian aspectos importantes en nuestra cosmovisión de la vida; ya que en esas crisis, en ese período de introspección en el cual nos cuestionamos generalmente la existencia, donde llegamos al momento de ¿cuál es el sentido de mi vida? O ¿qué haré con mi vida? Y aunque son preguntas que todos nos hemos hecho en algún momento, cuando se está frente a una crisis, es cuando estas cuestiones adquieren un carácter determinante, decisivo y algo que no se puede modificar, convirtiéndose en preguntas que no nos dejan descansar, generando un total estado de desasosiego y angustia.

Es posible que en algunos casos de “crisis existenciales” se debe a que generalmente muchos seres humanos se caracterizan por vivir constantemente “a la defensiva”, y ello es una reacción de las personas cuando internamente quieren protegerse, cuando en realidad es una reacción “antes de tiempo” que provoca un escenario de conflicto con su entorno y de esta manera se establece como una forma cotidiana en su forma de relacionarse.

¿Cómo saber si estoy “a la defensiva”?..Generalmente no se escucha a la otra persona; siempre se piensa que las otras personas mantienen dobles intenciones, o cargan un as bajo la manga; siempre está justificando sus acciones y se traen asuntos pasados que la otra persona pudo haber hecho mal y así evita hablar sobre el tema actual; todo ello como una forma inconsciente de protección contra lo que se supone un ataque, y al no querer admitir una verdad sobre algo personal; manteniendo una conducta de oír para responder y  no escuchar para comprender.

“Cuando digo controlar las emociones, quiero decir las emociones realmente estresantes e incapacitantes. Sentir emociones es lo que hace a nuestra vida rica”

Daniel Goleman

No es preciso evitar las emociones, sino aceptarlas tal y como son, porque ellas son parte de la vida; por otra parte los cuestionamientos que podemos plantearnos en un momento de “crisis existencial”, no tienen contenido intelectual, sino que implican un compromiso personal, y la respuesta que se busca no va dirigida a satisfacer una necesidad filosófica, sino encontrar un sentido de nuestra vida; porque en esos períodos de crisis, nos enfrentamos por ejemplo a que las actividades que fueron motivadoras han perdido valor y ya no tienen sentido; se tiene la sensación de una insatisfacción generalizada aunque las cosas en apariencia marchen bien; lo que nos lleva a pensar que se debe darle un vuelco a la vida, pero no se sabe cómo hacerlo, teniendo la sensación de extrañeza con uno mismo, y muy posiblemente se comienza a cambiar de hábitos, lo que trae como consecuencia un cansancio emocional, comenzando el cuestionamiento por decisiones tomadas en alguna etapa, creyendo que nos faltan experiencias por vivir; sentir miedo por el futuro pues no se logra ver con claridad lo que nos puede traer.

Una  “Crisis Existencial”, generalmente está vinculada al proceso de crecimiento y maduración, por lo que puede ocurrir en cualquier instante de la vida, excepto en la infancia;  siendo habitual durante la juventud, etapa en la que nos enfrentamos a cambios profundos, aunque también puede presentarse en la edad adulta e igualmente en la denominada “tercera edad”,  período en el que se llega al proceso de envejecimiento con muchas situaciones que enfrentar y superar, incluyendo cambios físicos, emocionales y circunstancias para las cuales nunca hubo una preparación determinada, pudiendo darse algunos hechos concretos que desaten la crisis, habiendo causas emocionales muy profundas, por lo que los especialistas hoy día, hablan muchos sobre la importancia del manejo y control de las emociones, para avanzar en esa etapa donde la sensación de estar solo y aislado del mundo, es difícil de controlar, y el éxito en la vida tiene mucho que ver con el dominio de las emociones.

Parte de superar una crisis está en asumir ciertas conductas que reflejen nuestra coherencia en los pensamientos y actitudes, aprender que TODO es momentáneo, y asimilar que existe una solución para cada situación, una fecha de expiración y una enseñanza que internalizar; y que fallar es parte del éxito, porque fallar alimenta la constancia y la perseverancia para alcanzar el objetivo.

“No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca sucedió”

Joaquín Sabina

A continuación, quiero compartirles un mensaje dejado por un maestro oriental, acerca del Secreto de la Serenidad, esa emoción tan importante para practicar en el día a día de nuestras vidas. ¡HASTA UNA NUEVA OPORTUNIDAD!

*El Secreto de la Serenidad*

Un día Tsin Shih le preguntó a su maestro cuál era el secreto de su imperturbable serenidad, a lo que éste respondió: 

* Cooperar incondicionalmente con lo inevitable.

*Explíquese maestro – dijo todavía confuso su joven alumno.

* La vida nos enfrenta todo el tiempo a situaciones impredecibles que a veces ni los más experimentados pronosticadores pueden anticipar.

En general, estas son situaciones que no queremos y ahí es donde se origina el sufrimiento y donde se perturba el alma. Es en el momento que no aceptamos lo que nos pasa cuando comenzamos a sufrir el desgaste emocional y el sufrimiento que esto conlleva. La pérdida de personas queridas, una pérdida económica o una ruptura sentimental son claros ejemplos del origen del sufrimiento.

En todas las situaciones, nuestra mente se resiste a aceptarlo, ¿qué paso? Nuestro ego perdió el control.

Aceptar los hechos que «creemos» que no podemos controlar es parte de elevar nuestra energía y aprender que la aceptación, no debe ser resignación. Aceptar es interpretar que es parte de la vida tener momentos duros que nos llevan a aprender algo.

Cuando más rápido nos adaptamos a una circunstancia menos sufrimos… y no me refiero a ser indiferentes o que nos resignemos como ovejas.

Aceptar significa no resistirnos desde nuestro interior. Entender que cada situación tiene una explicación, que todas las cosas pasan por un «por qué» y dentro del mediano o largo plazo son siempre a nuestro favor. Es parte de comprender que la vida no te coloca situaciones para castigarte, sino para aprender algo, entender, crecer y luego seguir avanzando. 

Pero esto requiere que primero aceptes lo que te sucede. Esto es una actitud de madurez, de crecimiento espiritual y humano.

Un refrán dice «Dios sabe cómo hace sus cosas» y está referido a que en general las cosas que nos ocurren no son cuando nosotros queremos sino cuando es el momento indicado.

Esos momentos rara vez ocurren automáticamente y a nuestro antojo, pero si analizas tus circunstancias en retrospectiva, deberás reconocer, luego de cada mal momento y con una mente clara, el beneficio final de todos los acontecimientos. 

No sufras, acepta, coopera con lo inevitable y la sabiduría llegará a ti para que puedas entender, aprender y adaptarte a lo nuevo.

 Todo tiene una razón de ser, solo con paciencia y mirando hacia atrás vas a poder comprenderlo todo.

“No siempre puedes controlar el viento, pero puedes controlar las velas”

Dr. Bob Chope

Naguanagua – Estado Carabobo – Venezuela

Nervis Nava
Nervis Nava

Escritora especializada en investigación y divulgación de temas asociados al desarrollo personal, de autoayuda, virtudes y valores humanos positivos. Venezolana, del estado Zulia, defensora de la libertad, la república, la propiedad privada y el estado de derecho.  

UNETE AL CLUB

¡Se parte de El Candil!

Recibe actualizaciones cada domingo

¡No hacemos spam! Lee nuestra [link]política de privacidad[/link] para obtener más información.

UNETE AL CLUB

¡Se parte de El Candil!

Recibe actualizaciones cada domingo

¡No hacemos spam! Lee nuestra [link]política de privacidad[/link] para obtener más información.

Tu opinión cuenta. Nos permite valorar contenidos.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.