FREDDY RIERA – EL CANDIL – AÑO II – N° 70

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El comunismo en la isla cubana va por 60 años y en Venezuela va por 20. Fidel y Chávez pasaron al otro mundo de donde no se regresa, y en ambos países, a pesar de la ausencia de esos dos diablillos, el sistema totalitario se mantiene.

En todo ese tiempo, a pesar de las declaraciones de voceros del Departamento de Estado de la Unión Americana informando sobre la amenaza que ello representa para la seguridad del hemisferio; a pesar de las medidas adoptadas para bloquear las vías económicas y las rutas de abastecimiento de ambos sistemas tiránicos, y a pesar del rechazo a esos dos gobiernos por parte de cuanta organización de países existe en el mundo, a pesar de eso, ambas tiranías comunistas aún sobreviven.

Tanto en Cuba como en Venezuela, se han creado las condiciones internas para sostener a ambos sistemas. Se han desplegado estrategias y tácticas psicológicas, así como estrategias y tácticas de guerra y de fuerza que han dado sus frutos. Son métodos ya probados basados en el conocimiento y dominio de la naturaleza humana, del conocimiento y dominio de las respuestas y reacciones del ser humano ante determinados estímulos.

Ellos también saben que los países donde impera el estado de derecho, por ser defensores del derecho, eso mismo, los hace débiles para enfrentar a otros gobiernos con estados fallidos, ya que las decisiones tardan demasiado tiempo en ser tomadas, y ese tiempo es aprovechado por esos sistemas comunistas para afianzar su modelo, con el agravante, que organismos mundiales creados para defender los derechos humanos, han sido tomados por la izquierda.

Desde que Chávez tomo el poder en Venezuela se instaló el poder militar. Los militares salieron de los cuarteles a ocupar carteras ministeriales y poco a poco fueron permeando todas los organismos públicos y empresas del estado. Toda la jerga empleada es de origen militar, así como todo el andamiaje paraestatal creado para evadir la ley, ya que dentro de la ley no es permitido.

La clase política venezolana forjada a lo largo de 40 años de democracia populista no tiene en su mapa mental otra cosa que no sea participar en unas elecciones. Tienen 20 años lidiando con una bestia que se ha aprovechado de las instituciones democráticas, pervirtiéndolas y luego usándolas como instrumento de su propia destrucción. Todas esas instituciones creadas en el período populista bajo el supuesto del estado de derecho han sido demolidas y son utilizadas por el régimen comunista como instrumento de burla.         

Los políticos y su política se quedaron muy cortos; no tienen organización ni estructura mental para enfrentar a un enemigo en el campo militar. Con una oposición cocinada en su propia salsa, sin disposición, ni actitud, y sin un ejército, ni fuerza que los respalden, no podrán sacar a Maduro.

¿Cuál ha sido la política de los EEUU frente al régimen comunista de Cuba a lo largo de estos 60 años? Con seguridad puedo decirles que la política ha sido neutralizar el avance militar de Fidel. A Fidel trataron de cercarlo económicamente. Le cerraron los canales de abastecimiento y lo asfixiaron, pero no lo expulsaron. Así han permanecido por 60 años y ahí están.

¿Estarán haciendo lo mismo con Maduro? Tal parece que sí. Carter, Clinton y Obama le dieron oxigeno a Chávez. Carter vino a apoyar a Chávez después de su renuncia, en un proceso de negociación impulsado por el propio Chávez, y Clinton y Obama financiaron la revolución comprando petróleo a 100$ por barril. Trump está imponiendo sanciones económicas al entorno de Maduro, y al mismo tiempo le lanzan un salvavidas en una propuesta donde lo exhortan a la realización de elecciones transparentes sin la participación de Maduro ni Guaidó, y ofreciéndole un salvoconducto para que abandone el país sin castigo alguno; salvavidas que este no quiere agarrar porque sencillamente no se está ahogando.

Entonces, luce obvio que la política del norte es neutralizar a Maduro, de la misma forma que con Fidel; neutralizar el avance enemigo en la región sin sacarlo del poder, y si la oposición logra hacerlo, mucho mejor, pero ya hemos visto que esa posibilidad no existe.

Una vez mas se evitará a toda costa el empleo de la fuerza por medio de las armas, ya que su costo en vidas humanas es sumamente alto, y su costo monetario es incalculable, y eso lo saben los comunistas desde hace mucho.

Militares en el poder no salen sino es por la acción de fuerza de otros militares. No es una corazonada; así nos lo demuestran los hechos históricos desde siempre. Desde hace 20 años, el escenario de la confrontación de fuerzas políticas dejó de ser político y Chávez lo convirtió en escenario de guerra, y con estos políticos que tenemos, y la política norteamericana, parece que habrá Maduro para rato, si es que no se muere antes.

Abajo el comunismo; Arriba la república y el estado de derecho.  

Naples – Estado de La Florida – EEUU