Por Gustavo Coronel
Si la humanidad hubiera querido progresar mediante la militarización no hubiera definido el progreso como CIVILIZACIÓN.
La Ley de Milicias concebida por el perro faldero de los Castro, Vladimir Padrino López, es embrutecedora. Es armas sí, educación no.
Fue aprobada con celeridad por la ilegítima Asamblea Nacional Prostituyente
Pediremos cárcel para los criminales quienes obligan a los venezolanos hambrientos a cargar un fusil para recibir comida
Una Asamblea Constituyente ilegítima, integrada por hampones, ha aprobado con singular rapidez – en menos de un mes – una ley de milicias presentada por un traidor a su juramento militar, el titular del MINIPOPUDEFE Vladimir Padrino López. Pretende este traidor que la incorporación de miles de seres famélicos a las armas pueda servir de escudo a la pandilla de criminales del Alto mando Militar, de los lavadores de dinero y de los narcos del régimen y protegerlos de la indignación universal en su contra.
Execrados por los países civilizados del planeta estos bárbaros se atrincheran en el concepto diametralmente opuesto al de civilización, es decir, la militarización o milicianización, términos que en la Venezuela de hoy son sinónimos de prostitución, indecencia y cobardía.
El traidor Padrino López, pretende que es necesario “Incorporar a la Milicia Bolivariana como pueblo en armas en el marco de una estrategia defensiva nacional, para hacer a la patria verdaderamente inexpugnable”.
¿Pensará realmente el traidor Padrino López que dotar de armas a miles de venezolanos desnutridos como producto de un acto de gigantesca extorsión (si no marchas no hay comida) convertirá al narco-régimen en inexpugnable? Hay que ver el aspecto de estas milicias para darse cuenta de que representan un tumulto sin convicciones, motivados por el hambre, con las huellas trágicas del sufrimiento en sus caras, montoneras que no representan una sociedad de pie por principios sino una sociedad de rodillas por necesidad.
Padrino López es el gran proxeneta de ese burdel ideológico que es el chavismo degradado a madurismo. Su papel como administrador de este gran burdel recibe, dependiendo de la región latinoamericana, los nombres de chulo, , chulapo, padrote, rufián, chichifo, mayate, maipiolo, cafiche, caficho o cafisho, fiolo, caimanque, cafiolo y, cuando el sexo es femenino, de madama, matrona o madrota.
Añade Padrino López en su intervención en la ilegítima Constituyente que esta medida nació con una clara orientación popular, que visibiliza a los más desposeídos y recoge principios de solidaridad y justicia social.
Al contrario, es evidente que esta medida representa un paso más hacia la anomia social venezolana, hacia el envilecimiento de nuestro gentilicio. Ello será el resultado de darle armas a un gentío motivado por el deseo de sobrevivir, dispuesto a fingir convicción, obligados a aceptar la indignidad para recibir lo necesario para subsistir.
Esta acción criminal del régimen no comenzó con Maduro, data desde la dictadura del paracaidista y se basa en la alianza cívico-militar propuesta por el antisemita y fascista Norberto Ceresole. Hoy estarán juntos celebrando la aparición del súcubo.
Padrino López ya no podrá salir de la cueva madurista. Es un agente de embrutecimiento de las mayorías venezolanas y deberá ser enjuiciado por la justicia venezolana y la internacional.
Queridos compatriotas:
Civilización es progreso, dignidad, honestidad, transparencia, solidaridad social.
Militarización es atraso, corrupción, traición, contrabando de extracción, minería ilegal, lavado de dinero, narcotráfico, abuso de poder, despilfarro de bienes nacionales.
La elección no es difícil.
Virginia-EEUU
Domingo, 09 de febrero de 2020
Excelente…Màs claro?? Ni el agua de manantial…..