SIMÓN PETIT ARÉVALO – EL CANDIL – AÑO IV – N° 176.-
Tomado de la columna POETERIAS de Gonzalo Fragui
METÁFORAS
Me cuenta el poeta Ernesto Reyes, quien vive en Atenas, que en Grecia las estaciones de autobús se llaman metáforas, la flor favorita de los poetas.
Sabemos que metá-fora viene del griego, «meta», más allá, y el verbo «fero«, llevar. Metáfora es lo que da mayor luz a una oración, dice Aristóteles. Pero me explica el poeta que metáfora es también “mudanza”, “traslado”. Incluso en los bancos se utiliza la palabra metáfora para decir “transferencia”.
Yo ahora tengo mis dudas, no sé cuál elegir:
– La acepción poética: escribir metáforas y que después cada quien enamore a quien pueda.
– La acepción bancaria: decirle a algún amigo que yo le envío mi cuenta del banco para que me haga una metáfora.
– La acepción transportista: tomar un autobús en El Pireo y cerca de la Academia de Platón pedirle al conductor: “Me deja, por favor, en la próxima metáfora”.