CAMINANTE NO HAY CAMINO – FREDDY RIERA – EL CANDIL – AÑO III – N° 139.

En Venezuela el gobierno ha sido usurpado. La legalidad ha sido desplazada, por tanto carece de toda legitimidad. El gobierno es ejercido por una mafia cuya cabeza principal es el colombiano Nicolás Maduro. El narco regimen necesita con urgencia mostrar al mundo que es apoyado por las mayorías del pueblo; es un viejo ardid que gusta mucho utilizar a estos gánsteres, y el medio para lograrlo, es por la vía de elecciones amañadas.  

Necesitan mostrar al mundo que ellos permiten la libre participación de opositores. Necesitan ganar a como dé lugar todas las elecciones.  Esta gente sabe que la mayoría los rechaza, de ahí que no pueden promover elecciones transparentes con un ente imparcial porque saben que perderán todas las elecciones. Entonces hacen lo que mejor saben: Hacer trampa.

El usurpador ilegal crea una AN ilegal, un TSJ ilegal y un CNE ilegal. Con esa estructura ilegal crea una ilusión de legitimidad violando la constitución. Es decir, patean muy fuerte al imperio de la ley. Crean su propia ley al margen de la Carta Magna, una ley maleable, bofa, fofa, que pueden ajustar a sus intereses valiéndose de instituciones judiciales corrompidas, intervenidas y totalmente parcializadas para la causa de la mafia comunista.

Una vez creada la infraestructura alineada con sus intereses, ahora solo faltan los votos, pero saben que nadie votaría por ellos, ni siquiera los de su mismo partido político, entonces echan mano de los votos opositores, que los hay a borbollones. Además, saben que los partidos de oposición tradicionales van a exigir condiciones, y dada las circunstancias, no las tendrán. El régimen necesita asegurar la victoria, y la única forma es interviniendo a esos partidos y colocar ahí a líderes corruptos. Si no hubiese partidos de oposición dispuestos a participar, ellos los inventan, como es el caso para estas elecciones. Ese es el panorama para estas elecciones regionales en Venezuela.

Esos líderes de oposición han sido coaccionados, los han corrompido, y les han asignado una misión: Participara en estas elecciones obligatoriamente de forma separada. Eso garantiza que no habrá unidad.

El régimen usurpador necesita de esos votos opositores para transferirlos al PSUV, ya que sus propios votos son marginales. Así, ellos aseguran que habrá votos suficientes y verdaderos, y podrán demostrar que los votos están, que son reales, que las papeletas son la evidencia que si hubo participación.

Es falso que al régimen le convenga la abstención, si no, ¿para que permite la participación?, El fin es captar un volumen de votos suficientes para perpetrar el fraude cómodamente, porque con altos volúmenes de participación se obtiene una cifra global numéricamente consistente para hacer una redistribución de votos por circuitos sin que se note de forma descarada. Es con altos volúmenes de participación donde más fácil se puede perpetrar el fraude. Con una mínima participación no podrán aplicar el algoritmo matemático para hacer la trampa. De esta forma, el equipo de expertos cubanos y rusos que operan en el lado oscuro de este sistema pueden lanzar su algoritmo matemático que distribuyen los votos de forma relativa y consistente, de forma que no se nota el fraude.  

El régimen de Maduro es ilegal, ya es ilegitimo. Es falso que votando en estas elecciones se legitima a Maduro. Participar en estas elecciones es colocarse del lado del usurpador, para los fines del usurpador.  

Algunos dirán que si nos abstenemos no hará falta que el régimen haga trampa. Eso sería cierto si el único partido inscrito en el CNE fuera el PSUV, o si el único partido existente fuera el PSUV. Pero ellos no pueden mostrar al mundo que son una dictadura con una única visión, además nadie votaría por ellos a menos que los votantes fueran amenazados.

Para eso son los votos que necesita el régimen usurpador, no para lo que fraudulentamente nos quieren hacer creer los políticos corruptos, alacranes, creando falsos sentimientos de culpa que si perdemos será por los abstencionistas, cuando ellos mismos saben que nada podrán hacer ante un árbitro parcializado y una justicia corruptas.

Esos líderes de esa pseudo oposición están en pleno conocimiento que no tienen el control de las mesas electorales. No tienen control de nada, así que no tienen forma de defender tu voto. Además, el régimen pondrá en práctica todas las artimañas para poner obstáculos al momento de instalar las mesas. Ya lo hicieron siempre y ahora con mas empeño.

Y por último, tomando en cuenta el mensaje del presidente interino legal y legítimo Juan Guaidó, (Que conste: no soy Guaidolover), puedo inferir que no reconoce a ese CNE ilegal. El nombra alacranes a los opositores que participan en ese circo. Así que solo nos queda esperar si aquellos opositores que resulten seleccionados por el árbitro parcializado del CNE este domingo, se presentarán ante esa AN ilegal a juramentarse como funcionarios al servicio del régimen dictatorial, usurpador, criminal, mafioso, narcotraficante y comunista de Maduro.

La abstención ganará. Será una voz de rechazo absoluto a esa cuerda de políticos vendidos que no harán nada ni los dejarán hacer nada. Llamar a votar es reconocer a Maduro y desconocer a Guaidó. Es dar patadas al imperio de la ley. No es ético, no es moral, no es honesto llamar a cometer un acto ilegal. Llamar a votar es instigar a delinquir. Se debe salvaguardar el hilo constitucional.

Participar en un acto arbitrado por asesinos, ladrones, narcotraficantes, que están fuera del marco legal es inconsistente con los objetivos y propósitos que queremos rescatar. Es como decir vamos a pecar para ir al cielo. Es incongruente. Votar en estas elecciones es como unirse a una banda delictiva que ha sido contratada por una mafia, con la creencia que vamos a pelear contra esa mafia, pero es todo lo contrario, te estás uniendo a ella.

Ya que quienes rechazan la intervención extranjera son los que llaman al voto, entonces lo congruente sería la unidad en torno al imperio de la ley. El resultado de esa elección nos dará una idea de la cantidad de ilusos y auto engañados que quedan en el país.

Una estrategia de unidad con base en el imperio de la ley en torno a un llamado de abstención elevaría la calidad ética, moral y aumentaría considerablemente la credibilidad de los partidos de oposición, y se colocarían en sintonía con la conciencia mayoritaria.

Si en ese proceso, los partidos opositores intervenidos captan la mayoría de los votos y el CNE les asigna esos espacios, como ellos esperan, entonces el régimen aplicará de inmediato su plan de estado comunal, con lo cual sepultarán de una vez este modelo de elecciones regionales.

Saludos mis apreciados amigos. Es solo mi opinión. Que no nos desviemos del objetivo supremo de sacar a esos tiranos y restaurar la República.

NO AL POPULISMO, NO DEBEMOS REGRESAR AL MISMO MODELO DE LA CUARTA QUE NOS ENTREGÓ EN LAS MANOS DE UN TIRANO. SI A LA REPÚBLICA, AL FEDERALISMO, A LA ECONOMIA LIBERAL, A LA PROPIEDAD PRIVADA Y AL IMPERIO DE LA LEY.