NERVIS NAVA – EL CANDIL – AÑO V – N° 212.-
La evolución de la humanidad está plagada de historias que muy a pesar de los principios filosóficos y espirituales que han existido, han imperado más los malos ejemplos en el comportamiento y proceder de la humanidad, en tanto que ha prevalecido la ausencia de ética y valores; quizás en parte sea porque los ejemplos que se han seguido no han sido los más idóneos, ello aunado a la globalización y a la inmensa influencia de los medios de comunicación, de las redes sociales en la actualidad, se podría decir que todo ha ido convirtiendo a la humanidad en una sociedad distópica y al borde de su autodestrucción.
El valor de una nación no es otra cosa que el valor de los individuos que la componen.” John Stuart Mill
Cuando se lee a través de los diferentes medios de comunicación, y redes sociales entre otros, que a Venezuela le urge una ayuda mundial de psiquiatría, porque la inmensa mayoría de sus habitantes está sufriendo de desequilibrios y desórdenes mentales-comenzando por quienes dirigen política y económicamente el país– cabe preguntarse: ¿Qué falta en la humanidad de la sociedad venezolana que le permita tomar decisiones coherentes y llevar al país a considerar otro estilo de vida? , decisiones que lo conduzcan a abandonar esa actitud extrema de inercia e incapacidad , para realizar acciones determinantes en beneficio propio y ajeno?
Se puede comenzar por considerar el aspecto cultural de la población, si se analiza que la cultura es creada por el ser humano, está presente en todos los grupos sociales, por lo que todos los individuos se ven afectados por ella, aportando identidad y sentido de pertenencia a los mismos y es a través de la cultura que el individuo se expresa, incorpora un estilo de vida, comparte y se relaciona con sus semejantes.
Cada región en el mundo presenta rasgos propios en cuanto a cultura, lo que refleja la diversidad cultural, la relación y convivencia en cuanto a la armonía que comparten en tiempo y espacio siendo muy importante, porque genera los intercambios de formas de vida y de creaciones que conduce al enriquecimiento de las diferentes sociedades.
“Lo preocupante no es la perversidad de los malvados, sino la indiferencia de los buenos”
Martin Luther King
Para la comprensión del desarrollo de la naturaleza humana, se debe tener claro el concepto de cultura, que no es otra cosa que el tejido indivisible entre lo social-cultural-biológico- afirmando que la cultura define la humanidad en el hombre, puesto que “no existe naturaleza humana independiente de la cultura” Clifford Geertz, donde la cultura configura la identidad y la conducta humana, desde lo sociológico con el conjunto de ideas, tradiciones, costumbres, creencias, ciencia, arte, moral y toda creación que produce la actividad humana y que caracteriza a un pueblo.
Ahora bien, nos referimos a la cultura como el conjunto de elementos y características propias de una determinada comunidad humana, incluyendo los aspectos como costumbres, tradiciones, normas formas de comunicación y de construirse como sociedad; abarcando aspectos como la religión, la moral, las artes, la ley, la historia y la economía de un determinado grupo, en definitiva, todo aquello que es creado por el humano es cultura. Incluyéndose en ello, elementos materiales como inmateriales, transmitiéndose de generación en generación.
Dentro de toda cultura se encuentran como elementos básicos, los llamados valores, que guían el comportamiento de los individuos y son la base de las normas dentro de una sociedad, así también se tienen normas, creencias, símbolos, lenguajes y tecnologías, que guían y conducen los cambios culturales profundos.
Así podemos ver que tenemos referencia en cuanto a Cultura Ciudadana, Cultura Intelectual, Cultura Política, Cultura Social, entre otras, para tratar de comprender la telaraña donde estamos inmersos. Explicamos por ejemplo que cultura ciudadana, viene a ser el modo en que los habitantes de un sitio específico generan lugares de participación activa para establecer relaciones de respeto por los demás, allí se recupera la confianza, se logran acuerdos para vivir en armonía, donde la cooperación, el diálogo y la auto reflexión, conducen a establecer armonía entre todos.
“El mayor de los beneficios que pueden hacerle a un pueblo, es enseñarle a la vez los deberes de un buen cristiano y un buen ciudadano.” Jerónimo Usera
La cultura ciudadana, sirve como forjadora de convivencia, porque fundamenta los valores que nos conducen al respeto por los demás, al diálogo, a la resolución pacífica de las diferencias, a la participación positiva de los cambios que hacen falta para mejorar la calidad de vida contribuyendo al bienestar de todos.
La cultura intelectual, equivale al cultivo del intelecto, que sería el desarrollo del entendimiento, de la mente, de la inteligencia, en el desarrollo del sistema educativo en toda la amplitud del horizonte en los diversos términos que ello acumula, como preparación para la integración de la sociedad en la resolución de los problemas traducidos a un bienestar común.
La cultura política, es un conjunto de conocimientos, actitudes y evaluaciones que la población determinada manifiesta en diferentes aspectos del sistema político en el que decides participar; abarcando tanto los ideales políticos como las normas operativas de un gobierno, siendo el producto tanto de la historia de determinado sistema político como de las historias de los miembros que la conforman.
La política, es el conjunto de actividades que se asocian con la toma de decisiones de agrupaciones de personas que se relacionan para la distribución de recursos o “status”; o también se define como el arte, doctrina o práctica referente al gobierno de los Estados, promoviendo la participación de la ciudadanía en las diferentes actividades gubernamentales.
Los sistemas políticos en su conjunto incluyen dentro de sus lineamientos sentimientos generales como el patriotismo, el desprecio por lo propio, los conocimientos y valoraciones de una nación y de un sistema político como socialista, democrático, constitucional, republicano, etc.
“Si los ciudadanos practicasen entre sí la amistad, no tendrían necesidad de la justicia.” ARISTÓTELES
La cultura social, son todas aquellas normas, costumbres, creencias y actividades que rigen la conducta de un medio ambiente o sociedad; gracias a estas culturas que guían una sociedad es que hay tanta diversidad de cosas, personalidades, alimentos, artefactos, inventos, entre otros. La cultura social es definida por Newstrom y Davis (1993) como » el medio ambiente social de las creencias creadas por los seres humanos, las costumbres, los conocimientos, y las prácticas que definen la conducta convencional en una sociedad.
Ahora bien, es difícil estar en este planeta y no ser reconocido como un ciudadano de alguna parte, y para ello solo se debe cumplir con ciertos requisitos, que a su vez otorgan algunos derechos, en la convivencia de alguna región. Y si algo se debe tener claro es que los problemas de este mundo, no solo son generados por las malas acciones y las decisiones mal tomadas, por la corrupción, la violencia, sino también y en mayor medida, por la actitud contemplativa de una gran parte que considera que los problemas de “los otros” no les conciernen, que esos otros que sufren, que están viviendo envueltos en calamidades, son solo cifras para las estadísticas.
“No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos” Martin Luther King
Es así como según las estadísticas, se prevé que en el 2030 el mundo tendrá un déficit mundial de 40% de agua, 1.100 millones de personas vivirán en pobreza extrema; millones de niños sufren las consecuencias de la pobreza extrema pasando hambre a diario; y toda esa información dice que cada día más, este mundo sufre por diferentes causas, hambre, esclavitud, guerras, persecución, injusticias, y de las que nos guste o no, nos moleste o no, todos somos cómplices y en cierta medida responsables.
De toda esa dramática situación no escapa Venezuela, cuando siendo el país con más riquezas naturales y recursos disponibles de Latinoamérica, se encuentra en una situación nefasta de pobreza y con una pérdida mínima de dos generaciones en cuanto a formación educativa y cultural en general, se refiere; por la irresponsabilidad, falta de cultura y coherencia de quienes han dirigido su rumbo en las últimas dos décadas.
“El político debe ser capaz de predecir lo que va a pasar mañana, el mes próximo y el año que viene, y de explicar después por qué no ha ocurrido” Winston Churchill
Espero no ofender a nadie al hacer referencia de la responsabilidad de todos en esta situación, puesto que solemos pensar y hasta creer que al no ser partícipes directos de todo esto, creemos que somos los “buenos” de la partida, porque no hacemos nada malo; sin embargo allí radica parte del problema, en el “hacer nada” y esa nada es la real enfermedad de hoy en día, de este siglo, de esta sociedad, porque demuestra indiferencia y pasividad, y es realmente el “silencio” de los buenos a lo que se refería Martin Luther King, porque siempre es y será el momento apropiado para hacer lo que es correcto, o como dice una expresión común..”ponerse del lado correcto de la historia”.
Asumir una actitud indiferente es una posición que condiciona la situación, que se comparte con el resto del mundo, y la que, según opinión de Schelling Aristóteles, esa indiferencia es una actitud de idiotas y ser idiota es una forma de actuar egoísta emocionalmente y dentro de ella estamos todos inmersos.
Esa actitud de espectadores indiferentes o idiotas, nos convierte en humanos deshumanizados y la verdadera innovación de estos tiempos no está relacionada con la tecnología, sino con los movimientos de los seres humanos en favor de otros seres humanos; personas que han comenzado a volver su vista hacia los demás; porque si algo debemos tener claro es que para que el mundo mejore, debemos comenzar a pensar en el “prójimo”, liberarnos de nosotros mismos, porque está en jaque nuestra libertad, nuestra vida, la de nuestros congéneres y la de toda la humanidad.
Llega la pregunta incómoda para todos y cada uno, ante la situación que se está atravesando, a nivel mundial y en cuánto a lo más cercano que nos incumbe, que es nuestro país, ¿qué vas a hacer, o que estás dispuesto a hacer en vías de encontrar una solución, o será cierto que no hay solución?
“He llegado a la conclusión de que la política es demasiado seria para dejarla en manos de los políticos” Charles de Gaulle
Como se planteó al inicio de este artículo, bien vale la pena preguntarnos ante la caótica situación de nuestro país ¿Qué falta en la humanidad de la sociedad venezolana que le permita tomar decisiones coherentes y llevar al país a considerar otro estilo de vida?, más humano, donde sea prioritario mejorar la calidad de vida, a través de principios, de valores, de esfuerzo, de trabajo por un bien y objetivo en común, transformar el sistema que nos envuelve y nos ha llevado a la ruina moral, social y económica; en mi criterio muy particular, en la actualidad de Venezuela falta demasiada cultura y sobra ignorancia, dentro de lo cual está inmersa la gran mayoría de la sociedad, mirando hacia el otro lado, porque los problemas del vecino son de él…..!Hasta una nueva oportunidad!
“No oponerse al error es aprobarlo. No defender la verdad es negarla” Martín Lutero
Nervis Nava
Escritora especializada en investigación y divulgación de temas asociados al desarrollo personal, de autoayuda, virtudes y valores humanos positivos. Venezolana, del estado Zulia, defensora de la libertad, la república, la propiedad privada y el estado de derecho.
Tantas cosas faltan para que Venezuela vuelva a ser un gran país… La ignorancia abunda.