ÁLVARO RAMIREZ – EL CANDIL – AÑO V – N° 211.-
Nuevamente en estos días se presentan situaciones relacionadas con la convivencia de los seres humanos, que tal como viene sucediendo con las acciones casi que inverosímiles producto de la intolerancia que lleva a “dispare y después pregunte”, también reflejan comportamientos que casi inducen a dudar de la racionalidad de los seres humanos. Son situaciones que, aunque pareciera que son dignas del rechazo y repudio de la gran mayoría de los seres humanos, cada vez se presentan más y casi que dan lugar a que dejen de ser noticia por lo “rutinarias”
Esta semana algunos titulares: Un país suramericano tiene 3 presidentes presos. Otro país hace una redada que parece condenar actos de corrupción casi que masivos y que aparentemente no conocía, aunque eran vox populi. Otro país se da el lujo de poner en peligro una posición envidiable en el ranking mundial de sistemas de salud, aparentemente para hacer realidad el anuncio de un ministro de crear un caos o emergencia, para justificar un cambio radical destruyendo todo los existente. En la democracia aparente de otro país, por su negativa a aprobar una reforma inconstitucional, los magistrados responsables por velar por el cumplimiento de la constitución son denigrados en público por el 1er mandatario. Un poco más al norte, un personaje enfrentando diversos juicios por incumplimiento de la ley y comportamiento deshonesto que ha generado hechos probatorios contundentes, pregona su deseo e intensión de ser candidato a la presidencia. En el sur una política condenada por corrupción considera y un grupo significativo de seguidores la respalda, lanzarse nuevamente a la presidencia de su país.
Los ejemplos anteriores no pretenden destacar comportamientos del sector de la sociedad relacionado con la gobernabilidad. Y servicio público. En la sociedad en general también están sucediendo actos reñidos con la ética y buen comportamiento. Basta ver los noticieros describiendo actos de maltrato y utilización de menores, irrespeto y violación a derechos de otros, estafa y enriquecimiento ilícito, asociaciones para delinquir, etc.
Ética: Definiciones de Oxford Languages
- 1. Disciplina filosófica que estudia el bien y el mal y sus relaciones con la moral y el comportamiento humano. – «Aristóteles fue el fundador de la ética»
- 2. Conjunto de costumbres y normas que dirigen o valoran el comportamiento humano en una comunidad.
Se entiende la complejidad que pudiera asociarse al comportamiento de diferentes comunidades en temas asociados con la moral y creencias. Sin embargo, cuando aquí mencionamos ética lo hacemos asociado a las costumbres de una sociedad con su cultura y lo que debe ser la ineludible responsabilidad de cada individuo ante los resultados de sus actos, en su sociedad.
En ocasión anterior hablábamos de la necesidad de fijar indicadores de gestión en el desarrollo de actividades profesionales en funciones privadas o públicas, como mecanismo para evaluar resultados. En el caso de la ética en el actuar de los seres humanos también es necesario tener standards de medición asociados a ese comportamiento en todos los ámbitos, no solo el profesional o laboral, sino también en la vida privada, familiar, social, para hacerse merecedor al premio o repudio de su sociedad.
Probablemente en el marco de evolución del ser humano y su capacidad para desarrollar tecnologías, cada vez se haga más difícil mantener algunas costumbres y aislarse en diferencias culturales en un mundo global. Los ejemplos hoy en día abundan y se ponen de manifiesto en las dificultades para legislar en cada país. Pensemos por ejemplo en temas como, la utilización recreativa de sustancias prohibidas, la indumentaria, las prácticas y creencias religiosas, la eutanasia, el aborto, las penas o castigos asociados a la justicia. Hasta hace poco pensar en cambios en el uso y costumbres asociados a estos temas era tabú. Hoy en día los legisladores han tenido que considerar que aspectos como la inmediatez en la disposición de información, los avances en las investigaciones médicas, la tecnología en comunicaciones, mecanismos de cálculo, desarrollo de equipos, impactan en el esfuerzo, la capacidad de probar hechos y por tanto aspectos como la remuneración, las prácticas médicas, los pensa académicos de los niños, la fertilidad, las relaciones maritales deben ser diferentes a lo que tradicionalmente era el uso y costumbre. Muchas cosas anteriormente incorrectas por su separación de la moral y buenas costumbres hoy por su cambio no riñen con la ética
Sin embargo, hay pilares que se mantienen para el funcionamiento armónico de cualquier sociedad: El respeto a los derechos de otros, el derecho de propiedad, el libre albedrio, la responsabilidad individual por las acciones libres, la libertad de creencias religiosas, el derecho a la retribución por el esfuerzo entregado a otros, son ejemplos de estos pilares y terreno para que la ética siga siendo el pegamento que aglutine las sociedades y oriente las definiciones de bien o mal.
Cualquier individuo para contar con el reconocimiento o rechazo de su sociedad debe enmarcarse en el comportamiento ético, de esa, su sociedad.
Mas allá de los juicios legales que son la forma extrema para dirimir la culpabilidad o no de un individuo y dirimir diferencias, los individuos que se enmarcan en el uso y costumbre de los pilares fundamentales, deben tener como sus jueces y evaluadores naturales a sus pares y a aquellos que sean de su mayor importancia como sus allegados. Para cualquier individuo debe ser de importancia mayor, la forma como trasciende, entendiendo como tal, la forma como es y va a ser percibido por sus allegados y pares al finalizar su vida, si se ha ganado con sus acciones la admiración y respeto.
En los ejemplos descritos anteriormente, es difícil imaginar para los actores, el aprecio y admiración de su sociedad y para sus allegados el soportar la afrenta de cargar con una historia que resalte como blasón familiar, el irrespeto y daño a sus congéneres.
Con estas consideraciones, creo en una concepción de la ética como, el marco para el comportamiento mínimo que permite a un individuo trascender, sin ser la vergüenza para sus descendientes en la sociedad donde se desenvuelven.
Partiendo de esta concepción se me ocurre algunas preguntas que podrían hacerse los individuos preocupados por ayudar a reforzar el comportamiento ético de las generaciones venideras.
¿Puede su comportamiento ser divulgado como digno de imitación por cualquier medio de comunicación? ¿Puede compartir con sus padres hijos y allegados, en forma transparente sus decisiones importantes en los negocios o vida laboral?
¿Con cuales indicadores de su paso por la vida puede medirse?
¿Qué puede dejarle escrito a sus nietos acerca de su historia? No se trata de cuánto dinero puede dejarles, en caso que así sea. ¿No es más importante describirle claramente, como hizo su “primer millón”?
¿Puede dejarle escrito a su nieto su fórmula para ahorrar, capitalizar y satisfacer sus necesidades, en vez de dejar a su nieto pensar que es bueno ser “vivo”? ¿Le puede dejar a sus nietos la historia de sus indicadores de desempeño a nivel laboral?
¿Puede Ud. registrar y divulgar las conversaciones con sus nietos sobre objetivos? ¿Propósitos? ¿Metas? ¿Relaciones familiares, pero también relaciones de amistad? ¿Cuáles son los indicadores que, desde donde se encuentre, puede decirles a sus nietos que les va a premiar?
¿Cuáles son esos indicadores deficientes, que estaría dispuesto a compartir con sus nietos para que sean mejores y no cometan los mismos errores?
¿Como hijo cuáles son sus indicadores que puedan hacer orgullosos a sus padres?
Creo que sería interesante si cada familia empieza a registrar, con el concurso de sus antecesores que han trascendido, su cartilla de valores y ejemplos a seguir que se nutran de generación en generación. Sería el reforzamiento de los valores familiares en forma clara, sin lugar a dudas. Aquellas acciones y hechos, cual tarjeta de presentación, por los que ya no solo un individuo, sino una familia y paulatinamente una comunidad, empieza también a trascender.
Probablemente muchos individuos y grupos familiares no soportarían la exposición transparente de sus valores.
Álvaro Ramírez
Gerente de logística de bienes y servicios operaciones y proyectos en Shell de Venezuela, Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), Petroquímica de Venezuela, S.A. (PEQUIVEN), BARIVEN, y Canadian Oíl Company de Colombia. SEO PROCURAMOS, proyectos, consultoría y asesoramiento internacional.